Campaña Greenpeace

¿ Y qué hacemos con las pilas?

¿Sabías que exportar y reciclar las 10 toneladas de pilas y baterías recolectadas por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires es más económico que enterrarlas en Argentina en rellenos de seguridad, como actualmente se hace?

Según datos brindados por el Gobierno de la Ciudad, la empresa Befesa S.A. (especializada en la gestión integral de residuos peligrosos) elaboró un presupuesto que determina que el costo para el tratamiento de las 10 toneladas mediante la disposición final en rellenos de seguridad rondaría los 72.600 pesos. Por otra parte, tomando en cuenta un presupuesto enviado por la empresa Silkers SA, el costo de enviar a otros países (como Canadá o Estados Unidos) esa cantidad de residuos para ser reciclados y lograr recuperar materiales valiosos, alcanza los 64.935 pesos.

El grupo ambientalista Greenpeace impulsa una campaña para que el principio que establece la Responsabilidad Extendida del Productor alcance el estatus de ley nacional de gestión de residuos de aparatos eléctricos, y a su vez reclama que las empresas no pongan obstáculos que impidan lograrlo. Ésta, se encuentra en el Senado de la Nación.  

 Existen reglamentaciones que obligan a los productores a hacerse cargo económicamente de su recolección y tratamiento, como es el caso de la legislación de la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá y en el caso de América Latina, en Colombia, con la reciente Resolución 1297 del Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial.

Algunas de las empresas que se encuentran involucradas en este asunto son: Duracell, Eveready, Energizar y Kodak, entre otras. Éstas se desentienden del destino de los productos que colocan en el mercado una vez que ha finalizado su vida útil. Según fuentes de Greenpeace, el problema reside en que al no existir una ley en Argentina que obligue a las empresas a tomar parte, ninguna busca llevar adelante la exportación, ya que de este modo, estarían involucrándose legalmente, llevando la responsabilidad a un nivel más alto.

Por otra parte hay que mencionar que todos estos residuos no están teniendo en nuestro país la gestión adecuada que deberían tener y que tienen en otros lugares del mundo. Lamentablemente los artefactos terminan hoy en rellenos sanitarios, en basurales a cielo abierto o muchas veces acumulados en las casas o en depósitos sin tener ningún tipo de tratamiento.

El reciclado resulta hoy el método más adecuado, tanto en las pilas primarias (no recargables o desechables) y secundarias (recargables) y en las baterías, y se logra así recuperar los materiales que forman parte de ellas. De esta manera no sólo se estaría obteniendo un nuevo componente, sino que a su vez, se consigue que el impacto sobre el medio ambiente sea menor. 

Apoyemos esta iniciativa, y descubramos lo importante que es contar con una ley que evite que todo esto siga ocurriendo.

Fuente: Greenpeace.org